el estadio Alberto Spencer resultó demasiado grande para el espectáculo que brindó el reggaetonero puertorriqueño Daddy Yankee, pese a que se esperaba un lleno total.
El escenario, con capacidad para 50.000 personas, se convirtió en la pista de baile para los casi 10.000 fanáticos del rey del reggaetón.
El show
El espectáculo, previsto para las 20:00, inició con una hora de retraso, pero los asistentes mantenían sus ganas de “reggaetonear” con el rey a flor de piel.
Por fin, a las 21:00, la reportera de Simplemente Mariela, María José Flores, sorprendió a todos cuando salió al escenario como presentadora del concierto. Esta novedad disgustó a más de uno ya que los abucheos estuvieron a la orden.
Pero María José no se amilanó y dio paso rápidamente a la cantante guayaquileña Andrea Bucaram, quien fue la única telonera del boricua pues la anunciada presentación del grupo La Trilogía se canceló.
Pese a su buena voluntad, interpretando temas como “Nadie lo sabrá”, “Bailando” y “Aniñado”, los fans no respondieron como ella hubiera deseado ya que salió de la tarima sin ser aplaudida y entre uno que otro “ella no canta”.
Entre tantos sinsabores, por fin Daddy Yankee subió a las tablas en medio de un espectacular juego de luces y con un atuendo militar.
El reloj marcaba las 21:15, momento propicio para interpretar “El Jefe”, “Bailando”, “Machete”, “Yo voy”, “Ella me levantó”, entre otros más. El espectáculo fue emocionante para las adolescentes que suspiraban por su ídolo boricua, quien durante más de una hora y media “hipnotizó” a los guayaquileños. “El rey de reggaetón” se despidió con el tema “Impacto”, que fue coreado por los fanáticos a todo pulmón.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
0 comentarios:
Publicar un comentario